lunes, 2 de julio de 2012

Guardamos cosas


Guardamos cosas

a veces apartamos para después
consentimos una que otra llovizna
diluida en tres granos de sal
envasamos tiempo pálido 
y amontonamos estorbos

abramos ventanas
para expulsar el moho
encendamos hogueras
quememos despojos
coleccionemos páginas en blanco
para cruzar puentes 
y resbalarnos a la otra orilla

salvemos unos soles y media lágrima
apartemos dos o tres instantes
para inventarnos eternos
 y seguir…

domingo, 10 de junio de 2012

Siempre la tierra


Es siempre la tierra
la que recupera, la que amamanta
la que atesora, devuelve y alimenta

Es siempre el motivo
de raíces, amores y olvidos
de destierros, fronteras y lágrimas no tan dulces

Es siempre el lugar
para sembrar recuerdos
con pies descalzos y el alma sin vestir

Y es siempre el final
no importa su aroma  —de sol, viento o chubasco—
es la vuelta al inicio: al origen

domingo, 20 de mayo de 2012

Alivio



a veces buscamos palabras en los dados
esperando que el azar incluya más de seis caras
y nos regale la fortuna de una docena de versos
sin saber que se escurre la suerte entre el silencio

otras veces escuchamos las gotas de agua fresca
descubrimos el murmullo sobre las hojas
y desenterramos las letras de la tierra húmeda
sintiendo el alivio de la semilla que nos habla

lunes, 19 de marzo de 2012

Reflexión bajo la lluvia

un vaso por derramar
y la lágrima que no pudo ser
espejo en calma
y una línea recta de punto a punto
la sonrisa que tuvo ser
y la puntada con remate
un puerto seguro
y efervescente.

jueves, 8 de marzo de 2012

Las dos caras de la luna












eres todas las lunas – eres mujer –
hilván de la historia
aguja para el remate
tiempo que aguarda
paciencia de invierno
paso que abre camino

aprendiste  todos los silencios – eres mujer –
alma-rota
corazón-destrozado
cuerpo-mutilado 
ira-dormida
tormenta-en-exilio
ojos-cerrados 
boca-amordazada
piedra-de-moler
cuento-de-hadas

eres todas la lunas – eres mujer –
mar en la sal
vida en el aliento
fortaleza en la palabra
alma en el eco
filo en la fuerza
abrigo en la ternura
sabiduría en la calma
        
  eres – tu camino – y  todas hacemos historia

domingo, 26 de febrero de 2012

Sinceridad


hay sentimientos descalzos
sueltos  y desperdigados
no taconean la vida
a veces andan de puntillas
otra veces corren por la piel
y muchas otras
caminan por la existencia

no escriben lágrimas en sepia
son regalo sin moña
vienen sin envoltura complicada
no se ponen abrigo, bufanda o sombrero
tienen gracia
siempre andan desnudos

domingo, 19 de febrero de 2012

El hilo









esto que se encierra en el alma
no cabe en una palabra
tal vez ni dos, ni tres
y tampoco en todas

esto que se encierra en el alma
lleva un grito prendido
que al doblar la esquina
se pierde y no busca el retorno

esto que se encierra en el alma
aprieta tanto la vida
que la vuelve un hilo de esperanza

miércoles, 15 de febrero de 2012

Amor de barro

                                                       
Por Mario Blanco
Hoy te desmoronas en mi alma
como arcilla mal horneada
y el polvo se lo come el viento.
Te desmoronas por cada uno de nosotros
que se llevan la muerte, las maras,
los narcos, el hambre y el olvido.

El Xocomil del tiempo me resucitará.
Despertaré en las tiniebla de tus bosques
en la mansión del pájaro serpiente,
borrará el mar las huellas de tus volcánicas arenas
danzaré en la luz que devora tus cavernas
beberé en tus caídas de agua clara.

El Xocomil del tiempo me resucitará.
Navegaré otra vez sobre tus lagos cristalinos
colgarán orquídeas de las caobas milenarias
descansaré bajo la sombra de tus amates,
escucharé las notas retumbantes de tu hormigo
se refrescará el futuro en el caudal de tus arroyos.

El Xocomil del tiempo  me  resucitará.
Nos nutrirá el aroma grato de tus lorocos,
no habrá bejucos importados de vainilla.
Junto a la colorida flor del amaranto,
vencera el maiz ancestral de los abuelos,
a los venenos y semillas de Monsanto.

El Xocomil del tiempo me resucitará.
Caerá el grano de café sobre tus campos
absorberá el potasio de las balas enterradas
y los pistilos de sus blancas florecillas
endulzarán la miel de tus indómitas abejas
apaciguando el alma que habita en tu morada.

El Xocomil del tiempo me resucitará.
Correrá el tapir por tus riberas peteneras
perseguido por jaguares sigilosos.
Desde Zaculeu hasta Uaxactún
se escuchará en tus húmedos vientos
el grito aullador del saraguate.

El Xocomil del tiempo me resucitará.
Y viviremos al ritmo de tu encanto verde
cobijándonos bajo la luz añil,
que el exilio pinta en el alma,
Volveremos a ti ¡sagrada patria!
suspirando, amándote, reclamándote.


domingo, 12 de febrero de 2012

Olvidos

hay recuerdos que no saben pedir permiso
se apoltronan en el sofá
no tienen el tino de esperar esa hora incierta
cuando la tarde ya no tiene a donde ir
y la noche abre la puerta

hay recuerdos que no saben pedir permiso
se cuelan entre las notas de una canción inesperada
todo sabe a lágrima
dan ganas de salir corriendo
y refugiarse en las palabras del poeta
él que tiene “una soledad tan concurrida”

hay recuerdos que no saben pedir permiso
el tiempo les borró la memoria
se hicieron sepia de tan guardados
regresan
no conocen el olvido


http://www.youtube.com/watch?v=YoL46eCD9Yo

domingo, 15 de enero de 2012

Invierno


Hay invierno en las palabras
hibernan en el alma
duermen mientras crecen
maduran mientras sueñan

Hay palabras de invierno
escritas en las alas
se cobijan en la búsqueda
sin prisa aguardan el vuelo


Hay invierno en las palabras
hacen del corazón su guarida
descansan del viaje
esperan otra primavera

domingo, 8 de enero de 2012

De escaleras

recostadas en la pared:
las escaleras
   un color por cada muro
   un color por cada día

subirán sueños
guardarán ilusiones
   vidas que ya son eternas
   y ahora descansan en paz

serán los últimos escalones
de almas ya dormidas
   muy distintas a otras – más sutiles -
   que disfrazan almas ajenas de peldaños

domingo, 1 de enero de 2012

Sin agobio

Abrimos un nuevo calendario para continuar tejiendo los días. Trae la incógnita de lo desconocido y la oportunidad. Desde este lado del mundo, aprovechamos el cambio del año para cerrar círculos y abrir nuevos; buscar otros senderos y repasar las huellas de otros más antiguos. Pero la fecha en el almanaque es relativa; no todos tenemos, ni seguimos el mismo. Pero lo que sí compartimos, sin ningún distingo, es un nuevo día. No importa en qué parte del mundo nos encontremos; con certeza, el sol sale a nuestro encuentro y nos dice hasta pronto, día tras día. Y para los que somos afortunados de abrazar estas veinticuatro horas — con nuestros cinco sentidos — y un techo que nos cobije tenemos un caudal invaluable entre las manos.

Cada amanecer en cualquier época del año es la puerta a la esperanza y es único. No vendrá otro mejor, tampoco otro peor, él vendrá con su singular obsequio: veinticuatro horas. Y los días serán variados, habrá días de ensueño, días de danza. Algunos amaneres serán eternos y la primavera practicará su magia. Y también viviremos días con lluvias, con tormentas, con eclipses y nubarrones. Que la rutina no tarda en vestirse de gris es una realidad; más a menudo que no, la taza de café se enfría y nunca faltará un recuerdo con sabor a sal que se tropiece con nosotros. Y así y todo, las agujas continúan su marcha. Nada las detiene.

Cada uno somos lo que hemos fabricado con nuestras acciones, palabras, gestos y sentimientos. Y esto nos es ni bueno, ni malo, sencillamente es. Conciliarse con el ayer, nos regala un mejor hoy. Lo importante es el aprendizaje y lo que haremos a cada instante para aprovechar esa riqueza de lo aprendido, lo vivido y lo amado.

Que el bullicio de un nuevo año, no sea un agobio, ni obligación de tirar el pasado que tanto nos ha regalado. Mejor que solo sea un espacio de transición, para recordarnos que el inicio es siempre, que la hoja en blanco está a la mano y lo más valioso siempre está al alcance del corazón.