recostadas en la pared:
las escaleras
un color por cada muro
un color por cada día
subirán sueños
guardarán ilusiones
vidas que ya son eternas
y ahora descansan en paz
serán los últimos escalones
de almas ya dormidas
muy distintas a otras – más sutiles -
que disfrazan almas ajenas de peldaños
Una metáfora muy acertada, Silvia. Siempre un placer leerte.
ResponderEliminarBesos desde la bahía.
Lees, Pedro, con el corazón. ¡Gracias! Un abrazo hasta la bahia.
ResponderEliminar